La alegría demostrada por los jugadores sobre el césped continuó en el 
vestuario de San Mamés. Los futbolistas del Real Madrid dieron rienda 
suelta a sus emociones y liberaron la tensión acumulada durante toda la 
temporada. Un nuevo título ya luce en el palmarés del club y en el de 
cada uno de los jugadores, que lo celebraron con champán, cánticos y 
fotos inmortalizando unos momentos inolvidables.